martes, junio 30, 2009
domingo, junio 28, 2009
501
Que los resultados no me sorprendan, no es algo raro. Creo que me la veia venir. Supongo que tendría que estar más indignada de lo que estoy. No logro definir si es resignación, aceptación o la vaga esperanza de que ese sector político conocido como "la oposición" (en mi librito le decimos neoliberales asquerosos) de nuevo llegue al poder y que todos los pelotudos que los votaron lo sufran y lloren porque no pueden seguir yéndose de viaje a Estados Unidos (aunque siempre podrán llamar a sus nacionales americanos) ni comprándose plasmas y todas esas cosas que les gusta hacer a los que votan a tipos como De Narváez o a alguien como Michetti, que son también las cosas, que en el fondo también le gustaría hacer, a la otra mitad de la gente que los votó.
Estoy a más de 500 km de distancia de mi mesa, y hoy casi casi que me alegré de no poder ir. Triste.
update: no sé por qué me indigno, si hace seis años (¡seis años!) me horrorizaba al ver que uno de cada cuatro argentinos había votado a Menem.
Estoy a más de 500 km de distancia de mi mesa, y hoy casi casi que me alegré de no poder ir. Triste.
update: no sé por qué me indigno, si hace seis años (¡seis años!) me horrorizaba al ver que uno de cada cuatro argentinos había votado a Menem.
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la politica argentina,
sociedad
viernes, junio 26, 2009
Señales
Entre las hojas de un expediente, apareció un calendario del año 2006 que tiene una foto de París.
martes, junio 23, 2009
La ciudad de los niños.
Y un día, se dio cuenta que los hombres no cumplían años más allá de los 24.
lunes, junio 22, 2009
Misterios de la vida laboral
Cómo hacen algunas personas para llegar un rato más tarde que yo y lograr irse - como mínimo -una hora antes, es un misterio que parece nunca lograré develar.
Test para averiguar si Ud. está viviendo su vida de acuerdo a sus deseos.
Imagine por un momento que su vida útil tiene fecha límite. Que el tiempo también pasa para Ud., que no tiene todo el tiempo del mundo, ni que es potencialmente inmortal.
Imagine que su vida tiene una fecha límite, y que ese vencimiento es en veinte años.
Imagine que dentro de veinte años una enfermedad sobreviniente no le permite vivir la vida como Ud. cree que debería ser vivida. Una enfermedad le quita la independencia, la autonomía, la razón, o todo junto.
O imagínese en el lecho de muerte dentro de veinte años, joven aún, lamentándose porque no habrá más días para hacer lo que le quedó en el tintero.
Con esa triste idea en mente, trate de imaginar cómo se sentiría con respecto a la vida que llevó hasta ese momento.
- Si se imagina satisfecho, Ud. está viviendo la vida apropiadamente.
- Si se imagina lamentándose por todo lo que no hizo, quizá sea momento de plantearse algunos cambios.
Sí, lo sé. Este es un test para empezar pum para arriba la semana.
Feliz lunes a todos.
Imagine que su vida tiene una fecha límite, y que ese vencimiento es en veinte años.
Imagine que dentro de veinte años una enfermedad sobreviniente no le permite vivir la vida como Ud. cree que debería ser vivida. Una enfermedad le quita la independencia, la autonomía, la razón, o todo junto.
O imagínese en el lecho de muerte dentro de veinte años, joven aún, lamentándose porque no habrá más días para hacer lo que le quedó en el tintero.
Con esa triste idea en mente, trate de imaginar cómo se sentiría con respecto a la vida que llevó hasta ese momento.
- Si se imagina satisfecho, Ud. está viviendo la vida apropiadamente.
- Si se imagina lamentándose por todo lo que no hizo, quizá sea momento de plantearse algunos cambios.
Sí, lo sé. Este es un test para empezar pum para arriba la semana.
Feliz lunes a todos.
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el tiempo
domingo, junio 14, 2009
Epifanía
Con la boca reseca de los nervios, dijo las líneas que había preparado y repasado mentalmente en las últimas semanas. Él pareció entender. Al menos se mostró comprensivo.
Se dio cuenta que posiblemente nunca descubriría si ese era realmente su carácter o sólo una fachada. Pensó que no estaba tan mal. Que era una duda positiva, porque, de esta manera, él quedaría en su memoria como un buen tipo. Y nunca tuvo razones para pensar lo contrario.
Volvió a su escritorio y pensó que en ese preciso instante comenzaba su último mes de trabajo.
Se dio cuenta que posiblemente nunca descubriría si ese era realmente su carácter o sólo una fachada. Pensó que no estaba tan mal. Que era una duda positiva, porque, de esta manera, él quedaría en su memoria como un buen tipo. Y nunca tuvo razones para pensar lo contrario.
Volvió a su escritorio y pensó que en ese preciso instante comenzaba su último mes de trabajo.
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